Somos una familia de Ushuaia que cumplió su sueño de tener un emprendimiento en el lugar donde nacimos y en el que estamos agradecidos de vivir.
Misión: Nuestra misión es hacer sentir a nuestros visitantes como en casa, y acompañarlos durante su estadía para que vivan una gran experiencia desde el principio en el Fin del Mundo.
La atención personalizada y la hospitalidad son unas de las cosas que más valoran nuestros huéspedes que han tenido la oportunidad de hospedarse con nosotros.
Nuestros valores principales son la calidez en nuestra atención, la practicidad en cada detalle y la buena higiene de nuestras instalaciones.
Hace más de diez mil años, en el fin del mundo habitaba un pueblo…
Pueblo que, entre otras cosas, veneraba al fuego, la base de su supervivencia, y hasta más importante que el alimento.
Había un momento en el cual, una pequeña chispa, esa pequeña llama que llevaban en sus canoas y cuidaban como la vida misma, se transformaba en un gran fuego alrededor del cual se congregaban.
Ese momento era el inicio, la luz, el calor, la vida…EL PRINCIPIO DE TODO.
Cuenta la leyenda que ese instante tan especial era llamado ANUM y que, en esa tierra inhóspita de largos inviernos, donde las horas de luz escaseaban y los fuertes vientos castigaban, solía retumbar entre las montañas y el mar, el grito ANUM, una expresión de agradecimiento, de unión, de continuidad de la vida.
En otro lado del mundo, mucho después, la mitología mesopotámica cuenta que los sumerios veneraban a ANUM como el padre de los dioses, el absoluto, el dios del cielo, el creador universal, que paradójicamente, cinco mil años antes, para los habitantes del Fin del Mundo era esa chispa de fuego que marcaba el origen, el principio de todo.
Anum es un momento tan esperado como esa primera chispa que enciende un fuego que da calor, y que desde un principio, mantuvo vivo al Fin del Mundo.
Deseamos que su estadía sea inolvidable desde principio al fin.
anumhostel@gmail.com
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